A veces, los edificios modernos acaban teniendo
rincones feos y ocultos que no concibieron sus diseñadores. Tienen sus propios
eriales interiores —espacios sobrantes que le pasan desapercibidos al público y
que a menudo acaban teniendo usos alternativos de poca monta y para lo que no
fueron pensados—.
Philip
Kerr, Mercado de invierno, 2014
Precisamente
en uno de estos espacios residuales han encontrado el cuerpo de la persona
asesinada. ¿Será que los arquitectos contemporáneos dejan espacios incluso para
el delito?
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