David Alfaro
Siqueiros (1896- 1974) Angustia
(1950)
Nuestro
término angustia proviene de la doble idea latina de angostura y dificultad o
aflicción.
Muy
bien pudiera provenir de ciertas experiencias en el momento preciso del
nacimiento, al atravesar para toda la vida el estrecho canal de parto. Por una
parte, podemos alojarnos muelle y ajustadamente en el útero materno, pero una
llamada fatal nos inflige un novedoso sentimiento de constricción a través de
la cual nos caemos en ese lugar abierto que llamaremos mundo.
Puede
que quedemos para siempre heridos por una aflicción por la estrechez, por la
pobreza extensional del lugar, por las constricciones insoportables al errar
según eso que suele llamarse libertad, al menos en términos simplemente ambulatorios.
Cuando
nosotros los arquitectos y otros tecnoburócratas confinamos a las personas en
miserables mínimos habitacionales, so color de maximizar la inversión social (y
preservar beneficios empresariales, faltaba más) estamos contribuyendo a la
diseminación social de ciertas angustias esenciales de las que sólo tendremos
futura conciencia, si es que vivimos para verlo y si es que conservamos un alma
para comprenderlo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario