Uno
de los productos de nuestras políticas de vivienda es la irrupción, en ciertas
regiones de la ciudad, de los denominados conjuntos
habitacionales.
Hay
quien confunde uno de estos conjuntos con un barrio, pero se equivoca mucho.
Un
barrio es una estructura rica, variada y compleja de implementaciones, en donde
la residencia está complementada con una plétora de servicios que completan la
vida urbana.
Un
conjunto habitacional es, en la mayoría de los casos, un agregado de viviendas
con el pobre complemento de algún salón comunitario capaz apenas de albergar
transitoriamente alguna reunión familiar extendida.
Un
conjunto habitacional, es, con frecuencia una irrupción anómala y empobrecida
en un tejido urbano roto.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario