Pieter Brueghel
1525 – 1569) Censo en Belén (1566)
Una ciudad es una comunidad de
asentamiento, es decir, un espacio social donde un colectivo humano reside, se
organiza y se reproduce socialmente.
(Castro Martínez, 2003)
Es
necesaria una asunción humanista del hecho urbano.
Esto
quiere decir, en principio, considerar a las personas como el primer factor de
consideración. Una ciudad que merezca ese nombre constituye una comunidad de
asentamiento, esto es, un conjunto estructurado de personas que actúan en un
concierto relativo tanto en lo que toca a su supervivencia, así como en su
reproducción como colectivo. El asentamiento hace mención a la efectiva
población en los términos en que en la ocupación del suelo el consumo domina
sobre la producción. El asentamiento supone el desarrollo de estructuras e
infraestructuras de acondicionamiento ambiental especialmente destinado al
establecimiento de la comunidad en una relación de dominio relativo sobre un
área rural tributaria, denominada hinterland. El asentamiento, en definitiva,
hace mención a un modo característico y específico de poblamiento del
territorio denominado a justo título como urbano.
Así
definida, la ciudad es un hecho social de establecimiento, con una determinada
superestructura administrativo-política y con una proyección dada al futuro.