Hans Gude
(1825- 1903) Vista del parque (1856)
Hay
ocasiones felices en donde los arquitectos ponen en valor a un lugar.
Allí
encuentran una escena interesante y acondicionan adecuadamente el punto de
vista para que las personas puedan situarse como es debido.
Se
trata de encontrar el emplazamiento óptimo para disfrutar de las alegrías
esenciales del paisaje. Así que hay que conocer, reconocer, situarse,
acondicionar la escena y conferir diseño a la contemplación. En cierta forma es
posible aprender de los pintores de paisaje que se contentan con realizar estas
operaciones con un lienzo.
Al
arquitecto se le da la posibilidad de operar con el sitio.
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